Los días contados
Este es el tercer libro de cuentos del autor, en donde se mantiene fiel a su costumbre de manejar ambientes diversos que no guardan gran afinidad entre ellos y, sin embargo, existe un hilo conductor que parte del mismo título: tener los días contados es una frase que la sabiduría popular utiliza cuando el final está próximo, ocasionado muchas veces, en una suerte de karma, por el mismo sujeto receptor de la fatalidad. En cada narración de este libro se mantiene latente la posibilidad inminente de un desenlace, la muerte de una persona o el fin de una situación. Lo que busca cada relato es encontrar el momento catártico en que el lector obtendrá esa epifanía de que a veces las cosas, ya no tienen marcha atrás. En “Los días contados”, los personajes transitan por un sendero lleno de zonas nebulosas, extrañas y surrealistas, muy parecidas a una dimensión que muchas veces raya el filo de la fantasía.