Reseña

Amina al-Sirafi debería estar satisfecha. Después de una carrera histórica y escandalosa como una de las piratas más notorias del Océano Índico y, tras haber sobrevivido a bribones traicioneros, príncipes mercaderes vengativos, varios maridos y un demonio real, se retira tranquilamente con su familia para llevar una vida de devoción, maternidad y absolutamente nada que insinúe la presencia de lo sobrenatural.
Pero cuando es localizada por la madre obscenamente rica de un antiguo tripulante, esta le ofrece un trabajo que ninguna bandida podría rechazar: rescatar a la hija secuestrada de su camarada por una suma digna de un rey. ¿La oportunidad de tener una última aventura con su tripulación, hacer lo correcto por un viejo amigo y ganar una fortuna que asegurará el futuro de su familia para siempre? Una decisión tan obvia que parece ser la voluntad de Dios.
Sin embargo, cuanto más se sumerge Amina en el caso, más claro se vuelve que hay algo mucho más inquietante en ese trabajo, y en la desaparición de la niña, de lo que le hicieron creer. Porque siempre es arriesgado querer convertirte en una leyenda, aprovechar tu última oportunidad de gloria, saborear un poco más de poder… pero el precio puede ser tu propia alma.