Hielo negro
En el silencio absoluto de los paisajes polares, el hielo no es blanco: es negro. Negro como el recuerdo que oculta, como el dolor no expresado, como la frontera que separa al hombre de sí mismo.
Hielo Negro es una novela de viajes y exilios, pero también de espejos interiores. Sus páginas nos transportan desde los gélidos confines de la Antártida a las cámaras más íntimas de la mente, donde la soledad y la esperanza se enfrentan en una lucha silenciosa.
Aquí, el mar es un abismo y la nieve una herida. Cada personaje carga con su propio naufragio: pérdida, guerra, migración, amor roto. Y en medio de esa oscuridad, el hielo negro se convierte en símbolo de resistencia, un territorio donde lo imposible perdura solo gracias a la fuerza de la memoria.
Con un estilo que fusiona lo real y lo onírico, la autora nos invita a viajar por un paisaje que no se encuentra en los mapas, sino en el corazón humano. Hielo Negro es a la vez un relato de supervivencia y un poema sobre la condición humana: una novela que congela el aliento y enciende la mirada.