Historias de espantos, seres que se transforman, tesoros escondidos y matrimonios engañosos
Quién sabe quién espanta, por qué sucede, ni cómo nos espantamos, pero cuando nos toca, sabemos de inmediato de lo que se trata, a veces, las apariciones no hacen mal: avisan o previenen, dan dones o descubren algún secreto, muestran algún tesoro oculto destinado solamente a quien los mira.