Morir en Aguascalientes: historia breve del rito funerario católico, siglos XVII-XX
El respeto de los sacramentos para el bien morir
La Iglesia Católica, a través del Concilio de Trento (1545-1563), para combatir a la Reforma Protestante, tomó una serie de medidas para luchar contra la herejía. El catolicismo vio en cada fiel, un soldado de Cristo, quien a cambio del seguimiento de la doctrina y buenas prácticas podía salvarse del pecado.
En tales disposiciones, la preparación para el “bien morir” era una de las más importantes, ya que la muerte sin recibir los sacramentos, significaba la condenación eterna en el infierno. La jerarquía eclesiástica se preocupó por observar que los fieles acataran de la manera adecuada el Rito Funerario, compuesto de dos grandes momentos: El Oficio de Difuntos y el Duelo, estos a su vez comprendían: el toque de agonía, la preparación del cadáver, velación, el oficio de entierro y los novenarios y sufragios por el alma.
En esta edición se muestra cómo se realizaba el Rito Funerario en el Aguascalientes desde el siglo XVII hasta la primera mitad del siglo XX. Recorreremos paso a paso las diferentes etapas del mismo, observando la evolución y adaptaciones que tuvo este lo largo de los años.