Mazorcas
Para la poeta cubana Reina María Rodríguez, el dato cultural, la memoria o las palabras que nos dicen los otros no pertenecen a realidades aisladas. La manera en que estas zonas del lenguaje se funden en un solo registro es lo que da consistencia a la rara melancolía de este libro. Tanto lo que la hija le comenta a la poeta sobre su cama desordenada, como el recuerdo del baño con el amante en una habitación llena de flores o la visión de los campos de maíz en la película de Wajda nos hablan de una intensidad que acaso se descubre ahora a través del poema en la dimensión que no se pudo vivir. La poesía de Reina María Rodríguez supone una experiencia similar a la de observar una pintura donde la inigualable cualidad de la luz se sospecha como resultado de un trabajo de capas.