Ventanas cerradas, ventanas abiertas
historias donde convergen lo siniestro y lo inocente, la melancolía y el olvido. Son cuentos donde podemos atisbar lo perversas que llegan a ser ciertas relaciones familiares, lo doloroso que resulta a veces el aburrimiento y cómo el amor se desdibuja frente a los ojos de los que un día se amaron sin que puedan hacer nada. El sexo, la violencia y el futbol, llenan estas páginas escritas con un lenguaje claro y directo que se recubre de poesía para permitirnos sentir la esperanza de unos personajes que, aunque tristes, aunque llenos de pena, navegan su amargura y su soledad y abren las ventanas al viento y a la luz del sol.