Cómo reclamar tu soberanía
Libertad, energía y poder en tiempos de distracción, incertidumbre y caos
La soberanía es la libertad interior, una relación con uno mismo tan
profundamente vital y energizante que te permite acceder a tu máximo potencial. El máximo potencial para el que naciste.
Créeme has sentido el fuego encendido de la soberanía en la boca
del estómago en diferentes momentos de tu vida.
Es la llama interior que te rescató y te hizo seguir caminando en
las noches más oscuras. Es el rugido de desafío que te ayudó a ponerte
en pie cada vez que te derribaron, una declaración de tu lucha y tu
derecho a vivir como eres, pase lo que pase. Es lo que te ha mantenido
vivo a pesar de todo.
Independientemente de la raza, la nacionalidad, la religión, el género o el estatus social, en el fondo somos iguales: soberanos. Todos tenemos el mismo deseo de vivir a la máxima expresión de nosotros mismos.
La soberanía nos permite acceder a la cueva del tesoro de posibilidades que existe en nuestro interior.
La soberanía es tu derecho de nacimiento.
En el fondo de ti, lo sabes.