Reseña

Abrirse al propio ser significa caminar hacia el encuentro del verdadero sentido de la vida y de lo que somos. En nuestro interior comenzamos a conocernos, a valorarnos, a aceptarnos, a ser felices con nosotros mismos sin necesidad de someternos a la dictadura del comunismo, de los estereotipos, o de la hipocresía social y política. Una auténtica vida interior nos libera de los fundamentalismos, radicalismos y conservadurismos religiosos, abriéndonos un horizonte cada vez más parecido al del corazón De Dios: un Dios libre, tolerante, paciente y misericordioso, solidario...
La búsqueda de espiritualidad, de valores de interioridad, de sentido se está abriendo camino cada día. Este libro nace precisamente con el ánimo de orientar y ayudar en esa búsqueda que termina siendo una responsabilidad ineludible de cada persona.