Reseña

Este libro reúne las canciones hasta ahora conocidas de la compositora española Emiliana de Zubeldía e Inda (1888-1987), quien después de recorrer medio mundo se estableció en 1947 en Hermosillo, Sonora, México, y se quedó ahí hasta sus últimos días. Emiliana fue una de esas artistas valientes que abrieron paso, tal vez sin pretenderlo, a las mujeres de las futuras generaciones. Su vida siempre estuvo rodeada de verdades disfrazadas y de misterios que hasta ahora no se han descubierto con certeza, y quizás el contacto con su obra será la mejor forma de aproximarnos a su hermética vida.

La mayoría de estas canciones no habían sido publicadas y permanecían hasta ahora guardadas en el Archivo General de la Universidad de Sonora. Es por eso que Soles y Brumas posee un importante valor, ya que por primera vez se pone a disposición de músicos y público en general la posibilidad de descubrir en un sólo tomo parte de su basta obra. El estudio y análisis de su legado aún se encuentra en su parte inicial, ya que este incluye obras para piano, guitarra, arpa y conjuntos de cámara; canciones para dos voces a capela, para voz y piano, y para voz, piano y maderas; arreglos para coro y obras completas a cuatro y hasta ocho voces iguales y mixtas; una misa coral, conciertos, sinfonías y poemas sinfónicos.

La responsable de este proyecto fue la soprano sonorense Elena Rivera, quien además fue la coordinadora del equipo de trabajo conformado por el pianista Jorge Robaina y los especialistas en musicología Leticia Varela, Fernando Serrano y Rocío Terán. Este trabajo de investigación, recopilación y edición se realizó gracias a la autorización del Gobierno de Navarra –España–, quien es el titular de los derechos de su obra, y al permiso otorgado para acceder al Fondo Emiliana de Zubeldía del Archivo General de la Universidad de Sonora. La aportación económica fue brindada por la empresa Intugo a través del programa de Estímulo Fiscal para la Cultura y las Artes del Estado de Sonora –EFICAS 2023–, que dirige el Instituto Sonorense de Cultura. Además, se recibió apoyo del Ayuntamiento de Hermosillo y de la Fundación Emiliana de Zubeldía e Inda.

Elena Rivera