Ni Dios ni rey
“ni dios ni rey” es y ha sido un grito fundamental del anarquismo; orden sin autoridad, sin jerarquía, cualquiera que esta sea.
Dios es un invento del neolítico, igual que la jerarquía, la propiedad, la urbe, los sistemas de riego, las religiones, el poder. Dios es nuestro invento más peligroso, ese que nos diviniza y nos instaura como dueños de la naturaleza; depredadores incluso de nosotros mismos; destructores de la economía solidaria, humana, natural, igualitaria del paleolítico.
Este escrito, además de ser un recorrido sumario por el horror absurdo de las religiones, es un llamado a reconocernos en el pulso común a todo; la vida misma.
Este libro nos invita a finalizar con nuestra mentira y banalidad; a terminar con el derroche, abuso y codicia que norman nuestras vidas, en especial las de los ricos y poderosos, que en mucho mayor grado amenazan la existencia de esta milagrosa nave que nos lleva por el tiempo y el espacio.
Este texto pretende despertar nuestra conciencia individual y de especie entre especies, y es sobre todo, un llamado a la HONESTIDAD.