La oralidad mercantil actualizada
La introducción de los juicios orales ha contribuido a que las prácticas judiciales se vuelvan más eficientes, en aras de la economía y la mayor circulación de la riqueza en el país. La oralidad mercantil coadyuva a resolver de manera más pronta y expedita las controversias entre los comerciantes e incluso entre quienes, sin serlo, realizan a diario actos de comercio como consumidores o usuarios de servicios financieros, y cuyos conflictos también exigen una eficaz solución a la par de la llamada justicia cotidiana.
Sin embargo, después de diez años de su instauración, se advierte todavía una práctica de ensayo-error en los operadores jurídicos del sistema de audiencias, respecto a la correcta aplicación e interpretación de los principios y los valores que rigen la materia prevaleciendo sobre las reglas o normas procesales.
En estas páginas, el lector encontrará un análisis de los antecedentes, los conceptos, los principios y las etapas del juicio oral mercantil, conforme a la óptica docente y la vasta experiencia del autor como juzgador, quien además aborda y da respuesta puntual a los problemas suscitados en el ejercicio forense.
La obra ha sido actualizada no sólo en cuanto a la legislación vigente y los últimos criterios emitidos por los tribunales federales, sino también con base en la necesidad de mejorar y orientar el sistema de audiencias orales hacia la justicia digital mediante el uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
El autor destaca la utilidad de plantear una correcta teoría del caso —acorde con sus elementos fácticos, probatorios y normativos— como un método integral para la mejor exposición, comunicación, organización y persuasión acerca del asunto judicial en conflicto, cuyo debido proceso constituye un mandato de cumplimiento de los derechos humanos, así como también la del uso de diversas técnicas, estrategias y herramientas de litigación oral, y da ejemplos significativos, como la selección idónea de testigos y peritos o la estructura de los interrogatorios, para perfeccionar la gestión del procedimiento durante el examen directo y el contraexamen de las personas intervinientes.