Adaptar la atención primaria al envejecimiento de la población mexicana
El envejecimiento es una etapa de la vida que debe disfrutarse con el máximo bienestar posible. Es responsabilidad del Estado alcanzar ese escenario a través de los múltiples andamiajes institucionales con los que cuenta, como el sistema de salud. En nuestro país, el logro de esta tarea se dificulta debido a que la población mexicana ha tenido (y tendrá) un envejecimiento acelerado, lo cual ha condicionado un panorama epidemiológico complejo. Esta situación se agrava con los retos a los que el sistema de salud actualmente se enfrenta, es decir, la saturación de los servicios de atención, el alto costo de estos, entre otras tantas problemáticas. Bajo este contexto, se ha señalado a la atención primaria y a los servicios de primer nivel como una solución. En el caso de las personas mayores, se diseñaron estrategias, como ICOPE, para guiar las intervenciones de los sistemas de salud en favor de lograr el envejecimiento saludable. Sin embargo, ICOPE es una parte de la respuesta. En las próximas décadas, nuestro sistema de salud debe transformarse para responder y cumplir con la obligación del Estado de garantizar el bienestar de la población adulta mayor. El Instituto Nacional de Geriatría elabora una serie de consideraciones a tomar en cuenta en la toma de decisiones dentro del sistema de salud, con el fin de adaptar los servicios de atención primaria a las personas mayores.