Análisis del aprendizaje mixto en diez instituciones educativas de la Ciudad de México
El presente trabajo, propone al lector interesado una imagen pormenorizada y un análisis detallado de los desafíos que presenta la modalidad de aprendizaje mixto al interior del subsistema de educación superior de la Ciudad de México. Se trata, como su título mismo lo se- ñala, de un estudio de caso que asume una tarea de investigación cuya urgencia no ha cesado de agudizarse luego de la pandemia por COVID-19, de consecuencias particularmente graves sobre el sector educativo a nivel mundial. En efecto, al volverse inviable la modalidad de estudio presencial a causa del confinamiento, no sólo se hizo manifiesto el papel protagónico de la tecnología para dar continuidad a la trayectoria escolar de millones de estudiantes, sino –de manera más profunda– una serie de cuestionamientos sobre las consecuencias que esta situación habría de tener sobre un amplio rango de aspectos relacionados con ese componente esencial del proceso educativo que es la interacción social.
Es precisamente en este contexto –el de, como se las ha llamado desde la sociología, las sociedades del riesgo– que se inserta el interés y la importancia de examinar los alcances y desafíos que enfrenta el aprendizaje mixto en las instituciones de educación superior de la Ciudad de México donde, incluso antes de la pandemia, se había ya prestado atención a esta modalidad de la enseñanza (por ejemplo, en el contexto de la recién creada Universidad Rosario Castellanos) como una alternativa educativa que mitigara la bien conocida inequidad en el acceso a los estudios superiores entre la población. Así, al ser el aprendizaje mixto una alternativa eficaz para hacer frente tanto a la desigualdad socioeconómica como a la emergencia de riesgos de toda clase, se hace más que nunca necesario analizar las problemáticas que entraña su implementación exitosa en contextos específicos, especialmente en lo relativo al grado de preparación de las instituciones educativas (de las cuales, en la capital de nuestro país, sólo un porcentaje menor la ofrece como opción de instrucción formal) para llevarla a cabo.