La confesión
En el engranaje del proceso de Praga
Artur London fue encarcelado en 1951 tras haber afrontado la persecución y el acoso. Fue una de las figuras centrales dentro de los catorce acusados en el Proceso de Praga; señalado culpable sin investigación previa, fue sometido a incesantes torturas físicas y psicológicas con el fin de que confesara crímenes que jamás cometió: espionaje, titoísmo y conspiración contra el Estado. La confesión narra la lucha que su autor libró durante dos años para probarle su inocencia al mismo Estado socialista al cual había consagrado su existencia.