Reseña

Con la maestría narrativa que lo ha caracterizado a lo largo
de su notable trayecto literario, el tabasqueño Bruno Estañol
—Premio Nacional de Cuento San Luis Potosí y Premio
Nacional de Literatura José Fuentes Mares— nos sumerge
guiados por las voces de Blas Botello y Cuitláhuac en la
vorágine de ese choque de civilizaciones, de concepciones
del mundo, de culturas aparentemente enfrentadas, pero
que, a final de cuentas, compartían visiones no tan alejadas
en relación con lo divino, lo sobrenatural y, sobre todo, la
fatalidad.

Con prosa pulida, exacta y de gran altura poética, Estañol (autor de novelas, cuentos y ensayos notables como El ajedrecista de la Ciudadela, Bella dama nocturna sin piedad y La mente del escritor, entre otros) nos muestra en esta breve gran novela las caras de una misma moneda, que con el paso del tiempo habría de forjar una nueva entidad que terminaría por llamarse México, la cual espera aún reconciliarse con su propio origen. Blas Botello y otros bellacos es una novela ineludible y necesaria para estos tiempos de extravío existencial y crisis identitarias, de perplejidad ante el presente y angustia sobre el futuro, en los que mirar hacia dónde venimos nos debe aportar algo de rumbo y confianza