La huida de Quetzalcóatl
Ésta es la única obra de teatro que escribió Miguel León Portilla. Aunque la terminó cuando aún vivía su maestro Ángel María Garibay K. (1892-1967), la conservó inédita hasta 2001. De ella, entre otras cosas, expresó Garibay K.: “El mito es nuestro, pero es universal. Huye Quetzalcóatl de sí mismo. Huye de sus obras. Así huye el hombre […] que huye del tiempo, que huye del lugar […] pero no sabe adónde […] Calcinado por su propia angustia, […] deja la hoguera para volverse estrella”. León-Portilla, ahondando en la visión náhuatl del mundo, nos lleva a imaginar cómo habrían concebido los antiguos mexicanos el drama existencial del hombre al tomar conciencia de su ser sin reposo, en un universo en el que todo es fugaz.