Como los gorriones
Luisa Josefina Hernández contrasta los papeles admitidos para el hombre y la mujer, dibujando como fondo a una familia de clase media donde se ha naturalizado el padre ausente y la madre imprescindible. Gracias a su habilidad para reconocer la identidad femenina, durante su novela y la proliferación de sus personajes, critica con maestría la sociedad mexicana que ahoga a la mujer y que enclaustra a sus habitantes en unas clases sociales que se diluyen con violencia y situaciones descaradas.