Reseña

Estábamos en los años noventa y, por supuesto, era otro mundo; si bien en esos momentos aún tenía lugar el boom en algunas disciplinas hermanas, como el movimiento de Calidad total, que señalaba la importancia de la gente para lograr niveles de desempeño de clase mundial; o el Desarrollo organizacional que basaba la transformación de las organizaciones en la educación de las personas. No existía el nivel de sofisticación en el desarrollo humano en las instituciones laborales como el que existe hoy en día.
Por otra parte, el entrenamiento de las personas en las empresas, que era en realidad el centro del congreso, en esos tiempos se realizaba principalmente de forma presencial y era sumamente conceptual, abundante en dinámicas vivenciales y exámenes de conocimientos, pero sin ningún sistema de seguimiento o acompañamiento para asegurar la mejora de los participantes de estos eventos