Toluca. Los divinos diablos
El 12 de febrero de 1917, en medio de apasionadas discusiones en el número 37 de la calle de Juárez, surgió, como por arte de magia, el Club Deportivo Toluca. No era aquél un grupo de improvisados, jovenazos de buena catadura, comerciantes de ropa unos, estudiantes del Instituto Científico y Literario otros, comenzaron a correr tras el balón en terrenos cercanos a la Alameda Central de Toluca. Los hermanos Román y Gerardo Ferrat, propietarios de la prestigiosa tienda de ropa La Valenciana, asumieron la paternidad del proyecto, y después de las entusiasmadas discusiones en torno al nombre, encargaron quizá al renombrado sastre francés Joaquín Lajous los primeros uniformes del que sería con el tiempo el orgullo futbolístico del Estado de México.