Diálogos entre pensamiento crítico y hermenéutica
Aproximaciones metodológicas
El pensamiento crítico puede considerarse no únicamente una metodología para hacer filosofía, sino
una actitud para pensar de una determinada manera. Ante una porción de discurso, esta actitud consiste
en evaluar y determinar qué tan fuertemente deberíamos creer en lo que el texto sostiene. ¿Dice alguna
verdad? ¿Descansa en evidencia adecuada para el tema? ¿Aporta evidencia suficiente para creer en
algo? ¿Está lógicamente bien estructurado y no contiene errores de argumentación? Estas preguntas
reflejan la actitud característica del pensamiento crítico. La hermenéutica, por su parte, no es menos
apropiada en su tarea fundamental de tratar de establecer el sentido correcto de un texto. Pensemos en
las muchas capas o niveles de lectura de un texto filosófico. Queremos saberlo todo de él: los problemas
que acuciaban al autor, su propósito, las determinaciones de su cultura y si pudo resistirlas o —incluso—
impulsarlas por otros rumbos, la recepción que tuvo por sus contemporáneos y cuáles fueron sus
avatares históricos, además de cómo lo recibimos hoy en día. La hermenéutica es el arte de interpretar
los textos y, para muchos filósofos, es el arte de interpretar cada aspecto del entendimiento humano.