Reseña

El libro presenta la guerra ruso-ucraniana como un conflicto del siglo XXI, relacionado con la disputa de EE. UU. por los recursos estratégicos como el gas natural y los minerales críticos para la transición energética baja en carbono y la hegemonía del capitalismo global. Es un análisis de fondo que trasciende a la guerra más allá del ámbito político, cultural y militar, colocándola como un fenómeno intrínseco del modo de producción capitalista.
Un eje articulador es el peak oil convencional y no convencional, que obliga al capital petrolero —así como al gobierno estadounidense— a la búsqueda de alternativas para su sustitución a través de mecanismos “extra productivos” como la guerra en Ucrania, para continuar detentando las bases materiales para la producción y reproducción económica del capitalismo estadounidense.