Teletrabajo: avances y oportunidades para su regulación
El documento Teletrabajo: avances y oportunidades para su regulación analiza la evolución histórica, conceptual y normativa de esta modalidad laboral, destacando su creciente relevancia en América Latina y el Caribe. Se muestra cómo, desde el trabajo a domicilio preindustrial hasta las actuales prácticas apoyadas en las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), el teletrabajo ha respondido a cambios tecnológicos, sociales y productivos. Asimismo, se revisan las tipologías y definiciones existentes, subrayando la complejidad de sus modalidades (autónoma, móvil, suplementaria, entre otras) y la necesidad de contar con marcos normativos claros que garanticen derechos laborales, salud y seguridad ocupacional, así como equidad frente al trabajo presencial.
El texto también examina los efectos positivos y adversos del teletrabajo, reconociendo su potencial para reducir costos, mejorar la productividad, favorecer la conciliación familiar y disminuir el impacto ambiental. Sin embargo, advierte sobre riesgos relevantes: intensificación laboral, sobrecarga doméstica —especialmente en mujeres—, aislamiento social, brechas digitales y afectaciones a la salud física y mental derivadas de la exposición tecnológica. Se enfatiza que la protección de la salud y la seguridad en entornos remotos exige protocolos específicos, prevención del tecnoestrés, medidas ergonómicas y el derecho efectivo a la desconexión digital. Estos aspectos deben integrarse en las políticas de prevención laboral y en los sistemas de seguridad social.
Finalmente, el estudio presenta un análisis comparado de la regulación en catorce países del continente, identificando avances, brechas y tendencias. Aunque varios marcos normativos han incorporado elementos clave como la jornada laboral, la compensación de gastos y la protección de datos, persisten heterogeneidades y vacíos en materia de corresponsabilidad de cuidados, igualdad de género y mecanismos de supervisión efectiva. En sus recomendaciones, el documento propone consolidar un enfoque integral y regional, fortalecer la inclusión digital, garantizar la compensación de costos, institucionalizar la desconexión digital y promover la capacitación continua. De este modo, se plantea al teletrabajo no solo como respuesta coyuntural a la pandemia, sino como estrategia sostenible de modernización laboral, inclusión social y productividad regional.