Reseña

“La ciudad no está ahí” no es un libro más sobre ciudades. Es un mapa de reflexiones y opiniones, un viaje crítico, una exploración que desarma y pone en duda nuestras certezas sobre los entornos que habitamos.
Nos propone algo radicalmente distinto: dejar de pensar en la ciudad como una maqueta técnica o una vitrina de tendencias y comenzar a verla como un organismo vivo, atravesado por tensiones, deseos, historias y contradicciones.

Este libro no se conforma con describir lo visible. Va más allá de las marcas territoriales, de las etiquetas como “smart” o “resiliente”. Aquí la ciudad se piensa desde sus silencios, sus bordes, sus ausencias. Desde la mujer que calcula su ruta, desde quien llega por primera vez y se siente invisible, desde los sabores, los recuerdos, las ruinas y los cuerpos que la habitan. También desde las inteligencias tecnológica y no tecnológica.

El autor convoca a filósofos, escritores, académicos, planificadores y ciudadanos para pensar la ciudad como espacio de conflicto y posibilidad. Porque una ciudad no se define, una ciudad es por lo que permite: pertenecer, habitar, imaginar o migrar.

Este es un libro para todo aquel que ha caminado una calle y se ha preguntado: ¿qué es lo que realmente hace que una ciudad sea mi ciudad?