Puedo explicarlo todo
Joaquín debe escribir un libro de autoayuda; pero: ¿Qué es lo que puede explicar este pícaro del siglo XX? Nada que Imelda y Gina -dos mujeres de sombra larga y mecha corta; cada una a su modo capaz de cualquier cosa- estén dispuestas a creerse fácilmente. Del diálogo punzante a la introspección ácida; los personajes de Puedo explicarlo todo estelarizan una historia plena de comezones entretejidas; rencores entrañables y demonios comunes; donde cada meandro puede ser un abismo y no se quiere más que seguir bajando. No muy lejos de ahí; se agazapa Dalila: una cómplice ideal que todavía no cumple los diez años y jamás ha leído un libro de autoayuda; pero cuyas pupilas deslumbradas parecen reflejar ya la sentencia del malandro y maestro Isaías Balboa: “El tiempo te lo dan; la vida hay que robársela”.