Futuro ancestral
En respuesta al daño causado por siglos de devastación colonial y las actuales crisis ecológica, política y social, advierte contra el poder del capitalismo corporativo y su impacto destructivo. El capitalismo invade todos los rincones del planeta y nos orienta hacia un futuro de progreso, logros y crecimiento prometidos, pero ese futuro no existe; simplemente lo imaginamos. En efecto, la idea del futuro nos persigue a veces con escenarios apocalípticos o se presenta como una posibilidad de redención, como si todos los problemas actuales pudieran resolverse mágicamente más adelante. En ambos casos, las ilusiones nos separan de lo que nos rodea. Esta orientación hacia el futuro nos ciega a lo que existe a nuestro alrededor, a las plantas y animales con los que compartimos la Tierra y a los ríos que fluyen por nuestras tierras. Los ríos no son sólo recursos para ser explotados por nosotros o canales para llevarnos nuestros desechos, son seres que nos conectan con nuestro pasado. Si hay un futuro que imaginar, es ancestral, puesto que ya está presente en el aquí y ahora y en lo que existe a nuestro alrededor, en los ríos, las montañas y los árboles que son nuestros parientes. ofrece una nueva perspectiva que desafía y trastoca algunos de los supuestos que sustentan las actitudes y mentalidades occidentales.