La tienda de hechizos
Un bucólico cuento repleto de libros de hechizos robados, amistades inesperadas, azucaradas mermeladas y amores todavía más dulces.
A Kiela siempre le ha costado relacionarse con la gente. Por suerte, como bibliotecaria en la Gran Biblioteca de Alyssium, se ha pasado la última década recluida entre los libros de hechizos más preciados del imperio, preservando su magia para la élite de la ciudad.
Cuando estalla una revolución y la biblioteca se ve envuelta en llamas, Kiela huye acompañada de su ayudante Caz, una planta mágica sintiente, con todos los libros de hechizos que son capaces de cargar, y se dirigen a una isla remota que Kiela jamás pensó que volvería a ver: el hogar de su infancia. Tras refugiarse en la casa de sus recuerdos, Kiela descubre, para su desazón, que su vecino es un cotilla (muy atractivo) que no capta las indirectas y que se empecina en visitarla un día tras otro para asegurarse de que tenga comida y para ayudarla a arreglar su nuevo hogar.
Desesperada por tener ingresos, Kiela descubre algo que ni siquiera la panadería del pueblo puede ofrecer: mermelada. Con la ayuda de un antiguo recetario de sus padres y un poco de magia ilegal, el jardín de la casa no tarda en ser invadido por arbustos cargados de bayas maduras.
Pero la magia puede servir para algo más que endulzar la vida, así que Kiela decide correr el riesgo que le puede suponer el uso de hechizos no autorizados y abre la primera tienda de hechizos clandestina en una isla que lo necesita desesperadamente.