Voces para la Filosofía
Es con la figura de los diálogos que la academia conversa con la sociedad a la que se debe, de los temas que le preocupan y le ocupan, es, pues, la forma más pura de interacción, fuera de los espacios suntuosos de la Universidad y los grandes centros de investigación. Por ello, convocamos a la ciudadanía a darle voz a la filosofía, pues sólo a partir de este atrevimiento nos convertimos en lo que John Rawls llamó una “sociedad bien organizada”, que conversa, que dialoga, que lee, que revoluciona a través del pensamiento y la discusión, que exige derechos y que los defiende.