Cuento y pedagogía
de la solidaridad a la ternura
Enaltecer creativamente sin adular, que las personas vivan su autoestima, mutuo aprecio y solidaridad. Esa es, en síntesis, nuestra utopía. La filosofía y las prácticas educativas aquí propuestas introducen a diversas formas para aproximarse a ese ideal.
Presentamos estas prácticas a través del programa Jugar y Vivir Ciencia y Valores (JVCV), que busca ofrecer para cada semana, de cada año de la educación primaria, un relato, una canción alusiva al relato y, con base en ellos, un conjunto de juegos didácticos. Con estos materiales se promueven formas diversas de solidaridad, de valorar a la gente, a uno mismo, a la vida y a la naturaleza.
Hoy proponemos que se dediquen entre dos y tres horas diarias a jugar a la autovaloración, a ser solidario, a formarse el hábito de disfrutar constantemente diversas formas de apreciar. En estas dos o tres horas, docentes, niñas, niños y jóvenes recrearán las magias del lenguaje mediante juegos, disfrutarán de su gramática y ampliarán notablemente su vocabulario. Después, una hora diaria estará dedicada a juegos de matemática y geometría generados, en principio, a partir del relato; dos horas a la semana podrán estar dedicadas a la biología, dos a historia y geografía. Al trabajar estas ciencias el grupo se referirá, normalmente, al relato de esa semana, así como a los problemas que se hubieran propuesto resolver al dialogar sobre las relaciones que la narración presenta.
Promover el aprendizaje creativo es un objetivo primordial. Cada docente será guía del proceso. En este libro se sugiere cómo hacerlo.