Tarzan de la selva
Tarzán de la Selva narra la historia de un niño llamado John Clayton, hijo de aristócratas británicos, que queda huérfano en la selva africana tras el naufragio del barco en el que viajaban sus padres. Abandonado a su suerte, es encontrado y adoptado por una tribu de gorilas. A medida que crece, se convierte en un experto en la vida salvaje, aprendiendo a comunicarse con los animales y a sobrevivir en la jungla.
A lo largo de su vida, Tarzán enfrenta diversos desafíos, incluidos encuentros con otros seres humanos que a menudo representan la civilización y la codicia. A pesar de su educación salvaje, Tarzán desarrolla una curiosidad por el mundo exterior. Su vida da un giro cuando conoce a Jane Porter, una mujer inglesa que se encuentra en la selva con un grupo de exploradores. Tarzán se siente atraído por Jane y, a través de ella, comienza a descubrir su propia identidad como humano.
La historia explora temas como la lucha entre la civilización y la naturaleza, el sentido de pertenencia y la búsqueda de la identidad. Tarzán, dividido entre su vida en la selva y su conexión con el mundo humano, finalmente debe decidir dónde pertenece. A lo largo de sus aventuras, demuestra valentía y honor, enfrentándose a peligros tanto de la naturaleza como de los hombres, y reafirmando su lugar como un héroe icónico.