Gentes de trueno
Moral social, delincuencia y violencia cotidiana en el Jalisco porfiriano (1876-1911)
Para las autoproclamadas clases superiores porfirianas ("aristocracia", burguesía y clases medias), el delito y la violencia no sólo correspondían a un discurso legal que se traducía en castigo para los transgresores, sino que rebasaba dicho ámbito, para instaurarse de manera cruda y llana en el propio discurso moralista que etiquetaba plenamente a aquellos que formaban parte o eran propensos a involucrarse en escándalos o en hechos de sangre como las ya citadas gentes de trueno y en las que podían caber vagos, alcohólicos escandalosos, prostitutas, jugadores empedernidos, ladrones, bandidos, buscapleitos, pervertidos, asesinos y en general, a todos aquellos hombres y mujeres, que fuera de la norma y de la "buena fama" que dictaba la moralidad, la legislación de la época y la buena conducta, subsistían de acuerdo a sus propios y muy particulares medios. Gentes de trueno que en Jalisco sobrevivían por lo general, en medio de la pobreza, el analfabetismo, la ilegalidad y de la pública "mala fama".
Un imaginario colectivo creado por el discurso de las clases dominantes porfirianas que ha servido para crear barreras y estigmas sociales y en el que sus representantes impusieran múltiples castigos a los anormales o desviados; castigos que han variado conforme al tiempo y a las condiciones socio-económicas y culturales que se estudien.