Las cicatrices de un linaje torcido
Cuando el detective vio al niño, supo la verdad, una verdad que le era difícil asimilar. Pero ¿qué había detrás de esa oscuridad que emanaba de Alejo? ¿De modo inexorable, la infancia predetermina el destino? En esta novela negra hábilmente tramada, basada en una historia verídica, no todo es lo que parece ser y aun los factores imprevisibles, el albedrío, las acciones que sólo pertenecen a la esfera del azar, se alinean para desatar una saga de infortunios.
¿Qué absurda pretensión echó a andar el plan maquiavélico que mueve a los descendientes de Bosco Andrade como piezas de un retorcido y funesto juego de ajedrez? ¿En realidad Alejo alucinaba? A veces la ficción se queda corta ante la maldad que crece en el mundo. A. J. Gómez expone aquí el lado sombrío de la mente humana al revelar la urdimbre atroz de las complicidades familiares que son el germen de un relato intenso y estremecedor.