Reseña

"El divorcio como proceso de sanación" −continuación de "Los platos que no hemos roto"−, es una obra de Andrea Camarelli, artista y madre de familia, quien era una mujer dedicada prácticamente al hogar, sin ningún conocimiento acerca del Derecho o de los procesos civiles y administrativos, mucho menos respecto a la materia familiar. Esta mujer, que ahora es escritora y ensayista, tuvo que hacerse de pruebas para afrontar su proceso de divorcio. Este libro, contado en primera persona, aparte de hacer un análisis preciso de aquel evento, constituye una relación de hechos que demuestra que la ley no está apegada a la justicia. Este libro es de gran utilidad para todas las mujeres que, como la autora, son víctimas del proceso; y lleva inmerso el deseo de que ellas encuentren personas moralmente justas y apegadas con vehemencia a la justicia.