Reseña

La memoria histórica de los Misioneros de Guadalupe es un testimonio valioso que refleja el
compromiso y la vocación de nuestra sociedad de vida apostólica a lo largo de sus 75 años de
existencia. Fundados en el contexto de un México que buscaba respuestas a sus desafíos
socioeconómicos y espirituales, Misioneros de Guadalupe ha desempeñado un papel crucial
en la formación y el acompañamiento de comunidades en Asia, África y América.
Durante estas siete décadas y media, el Instituto ha estado profundamente involucrada en el
ámbito educativo, ofreciendo formación integral a niños y jóvenes, así como apoyando
programas de desarrollo comunitario y acompañamiento en la pastoral de la salud. La labor
ha sido un pilar en la promoción de la justicia social, el fortalecimiento de la identidad cultural
y el fomento de la fe en comunidades necesitadas.
A lo largo de nuestra historia, Misioneros de Guadalupe hemos enfrentado diversos retos,
desde cambios en el contexto socio-religioso hasta la adaptación a nuevas realidades y
problemáticas. La resiliencia y el entusiasmo han permitido que sigamos siendo una fuente
de inspiración y guía espiritual para muchos.
En el marco de la celebración del 75 aniversario, es fundamental recordar no solo los logros
y contribuciones, sino también honrar la memoria de aquellos que han dedicado sus vidas al
servicio. Esta conmemoración representa una oportunidad para mirar hacia el futuro,
reafirmando nuestro compromiso de servicio a la misión ad gentes.