Reseña

El cuerpo como un reclamo que germina en la descendencia, el cuerpo como una protesta al cuerpo mismo, el cuerpo contra la muerte, el cuerpo que nos ancla a lo que más odiamos; estamos ante una antología donde es el cuerpo quien toma la palabra, quien inicia la rotación imprevista, la vuelta de tuerca de estas narraciones.

La vida no sigue un camino lineal, está llena de giros inesperados, proclama Alice Munro, una de mis cuentistas favoritas. Y en cada uno de estos relatos se disfruta ese componente de la sorpresa: desde la madre que decide, pese a sus dolencias, recuperar la juventud bajo la lluvia, hasta el bebé que hereda la metamorfosis del padre ausente, la unión de un joven con su enemigo a fin de figurar como mártir, la joven que cabalga contra los prejuicios o la venganza como la única posibilidad ante el abuso. Es así como lxs cinco cuentistas que componen esta colección inauguran imágenes imprevisibles en nuestra mente, las plantan, las hacen florecer.

Ernest Hemingway aconseja que los personajes deben ser tan reales que den la sensación de que lo que se narra pasó realmente. Estos cinco relatos lo consiguen y edifican un poderoso sentimiento de verosimilitud porque apelan a los cuerpos, al cuerpo que habitamos y transformamos día a día. Con este trabajo, el cuento, el primo pobre de la novela, cobra fuerza y relevancia. En esta época de tiktoks y de influencers, resulta relevante divulgar otras posibilidades para nutrir la realidad más allá de las pantallas. Presiento que, con este volumen, inauguramos una generación de cuentistas que poblará nuestra región de una narrativa poderosa. Lxs invito a tomar estas semillas, a permitir que nuevas imágenes desborden en ustedes.