La ciencia de la respiración
Respirar es vivir, y sin respiración no hay vida. No sólo los animales superiores dependen de la respiración para vivir y estar sanos, sino que incluso las formas inferiores de vida animal deben respirar para vivir, y la vida vegetal depende igualmente del aire para seguir existiendo.
Y el ser humano no sólo depende de la Respiración para vivir, sino que depende, en gran medida, de hábitos correctos de respiración para mantener la vitalidad y estar libre de enfermedades. Un control inteligente de nuestro poder respiratorio alargará nuestros días sobre la tierra, dándonos mayor vitalidad y poder de resistencia. Por otra parte, una respiración poco inteligente y descuidada tenderá a acortar nuestros días, disminuyendo nuestra vitalidad y exponiéndonos a la enfermedad.