Reseña

Querido lector, el libro que usted está a punto de comenzar surgió de una gran inquietud personal. Durante muchos años de mi formación me inquietaba esperar el momento en el que se me presentara una forma asequible de aproximarme a la teoría de Jacques Lacan. Estaba cansado de escuchar siempre los mismos argumentos dificultosos que se acompañaban de frases que se hacían lucir muy complejas, abstractas o enigmáticas y rebuscadas, para concluir diciendo que si, finalmente, uno no comprendía… eso estaba bien.
A esta dificultad, se le sumó una segunda cuando comencé a recibir pacientes. Me encontré esperando ahora algo distinto: que alguno de mis mentores me explicara algo sobre cómo debía desempeñarme en la clínica. La decepción fue similar. Detrás de un oscurantismo total para mostrar lo que hacían en sus consultorios y la excusa de que no se puede reducir el psicoanálisis a una receta o a un manual, los psicoanalistas que me rodeaban fueron incapaces de instruirme sobre cómo debía dirigir la cura.
Dediqué varios años de mi práctica y propuesta de transmitir el psicoanálisis a tratar de echar luz sobre algunos conceptos de la teoría de Lacan. Traté de explicarlos, de mostrarlos y de compartirlos. Hoy decido hacer lo mismo con la técnica lacaniana. Por eso digo que este libro surgió de una inquietud personal: la de comprender cómo es que funciona la clínica lacaniana y de qué herramientas técnicas se vale.