Ojos de sol
Diálogo en primer tiempo
¿Quiénes son los que salvan al mundo?
El hombre que cultiva su jardín, como quería Voltaire…
Esas personas que se ignoran, están salvando el mundo.
Borges
Así como lo apunta el poeta argentino en su largo texto “Los justos”, Jorge Luis Borges nos habla de todas aquellas personas que hacen acciones para sí y para el mundo sin pretender nada a cambio, por lo menos de forma inmediata. De ese tipo de personas es el catedrático Marco Antonio, quien comparte sus más personales pensamientos y sus más íntimas emociones, a partir de algo, aparentemente tan normal y tan común como lo es la reflexión de su paternidad. Pero al decir del poeta y del nuestro propio, en realidad esta reflexión no es tan común como se cree, o tal vez por serlo, se ha convertido en un no tema para pensarlo y repensarlo.
En nuestra sociedad el ser padre se ha convertido en un tema controvertido por el alto índice de abandono y de desapego; por eso, quizás, esta obra que hoy nos ocupa Ojos de sol. Diálogo en primer tiempo resulta ser un tanto insólita, puesto que nos habla de la estrecha relación de un padre con su pequeño hijo, un diálogo cotidiano, en donde el asombro, es esa revelación del padre, que al hacer consciencia de la responsabilidad que significa traer un hijo al mundo, poco a poco va asumiendo, como lo diría el filósofo español, Fernando Savater, en una actitud ética y política ante su propia paternidad: ética, por su carácter personal y política, por su preocupación social; desde esta perspectiva estamos ante una nueva generación de jóvenes que interiorizan está experiencia vital y no sólo se regodean en su felicidad y gozo, sino que, como en este caso, comparten literariamente este encuentro fraterno de metáforas infantiles que van cobrando relevancia ante la visión atenta y significativa de un padre que descubre el desarrollo cognitivo de su hijo.
Al escribir esta experiencia trasciende los límites de lo privado y abre la puerta de una paternidad que se desdobla en su propia infancia y dignifica uno de los momentos más trascendentes del ser humano, su ser en el otro, su propia inmortalidad en su descendencia a través de la palabra y su capacidad creativa. Frida Varinia