Una vida para gloria de Dios
Dios ya lo sabía, el don de un niño especial
Los testimonios vertidos en este libro, como los que compartimos con muchas personas que lo conocieron en tan distintos lugares, nos revelan más del ser de Víctor José Jesús. Su historia está llena de sorpresas e infinita ternura. Todo él, sin escatimo, estuvo inmerso en la vida humana tal y como es. Pese a las sombras que pueden opacarnos, Víctor vio en cada persona la totalidad del amor de Dios.
Las limitaciones físicas con las que vivió fueron su gran potencial para apreciar la dignidad humana con amplitud de conciencia. La heterogeneidad y pluralidad de los ambientes en los que creció, favorecieron la misión de su trayecto. Desde el principio hasta la meta, Víctor aceptó lo imposible y abrió brecha para muchas personas en todo lo posible y verdadero.
Aproximarse al despliegue de su personalidad, nos hace descubrir que Víctor J.J. es un buen compañero de vida. Su amistad nos ayuda, desde el cielo, a conseguir salud mental, emocional y espiritual, con la gracia de Dios.