Reseña

Pensar en el Derecho Penal implica ponderar los valores esenciales para toda sociedad y la exigencia de proteger a sus miembros contra cualquier conducta que pretenda vulnerarlos. Esta rama del Derecho es de observancia obligada en las sociedades humanas, puesto que se encarga de vigilar las conductas de los miembros del conglomerado para garantizar la paz social. Ademas, cuenta con los elementos adecuados para sancionar a los transgresores de la ley cuando la amenaza de la pena no ha sido suficiente para que actúen con temperancia. Para evitar los abusos que antaño imperaron en el campo punitivo, debe de conductas consideradas
delictivas y, por lo tanto, nocivas para la sociedad, además de las penas que a cada una les corresponda. El Derecho Penal se erige entonces como un último recurso para la preservación del orden social a disposición de los órganos que ejercitan el poder público. El uso de las leyes penales se justifica en función del papel protagónico de estos fines. El presente libro realiza un análisis profundo de varios aspectos torales del Derecho Penal
-entre ellos la historia a partir de la evolución de las ideas penales- para posteriormente abordar su concepto características claves.
Asimismo, se estudian las principales escuelas penales y se ofrece una panorámica de la parte general del Derecho Penal para culminar en una obligada revisión de la Teoría del Delito como parte insoslayable de tan importante rama jurídica.