Reseña

La vida nos enseña y nos brinda regalos, no sé si una o varias veces a lo largo de nuestra existencia, pero siempre hay algo que nos deja. La familia, los amigos y la salud son privilegios que siempre agradezco al Creador.
Tuve la fortuna de coincidir en este plano terrenal con un ser humano extraordinario: Don Carlos Herrera. Me brindó la oportunidad de conocerlo como persona y no como personaje. Me habló de sus pensamientos, sentimientos, familia y sueños.
Todos ellos quedan plasmados en esta obra junto con su fe y sus afectos. Su familia fue su más grande fortuna, y su legado quedó inmortalizado a través de su esposa, Doña Vilma, y sus hijos, Lety, Ernesto y Carlos Manuel.
Su vida empresarial, su pujanza, firmeza y nobleza también quedan grabados, junto con su lucha contra las injusticias. Los invito a conocer parte de la vida de Don Carlos Herrera, una historia que aún continúa.