Nacionalismo y color
Una historia de la pintura mexicana del siglo veinte
Se ha difundido ampliamente la idea de que nuestro país es particularmente colorido, debido incluso a la fertilidad de la tierra y al buen clima. Para quienes hemos vivido en México nos queda claro que ésta es sólo una verdad a medias. A lo largo de la investigación que dio pie a este trabajo se comprueba que decenas de datos han contribuido a crear esta imagen que van desde la geografía de México, pasando por la filosofía de la visión. Durante la colonia se pintaron y tiñeron todo lo que era posible a las personas, como sus textiles y sus alimentos. Un ejemplo es el rojo intenso de la grana de cochinilla. No obstante, en muchos casos, estos pocos colores fueron utilizados de manera magistral, logrando fuertes contrastes de acuerdo con la interacción cromática de la que habla Josef Albers, incrementa en la visión la intensidad del color local.