Reseña

Esta obra presenta una narrativa de cómo los hablantes de lenguas materna indígenas en concreto, los de la cultura Me´phaa y los Náhuatl, ponen en contexto su lengua originaria, asimismo, se presentan los resultados de una encuesta aplicada a estudiantes normalistas de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Gro., a los docentes de tres instituciones educativas de educación primaria con enfoque intercultural bilingüe que tienen su origen en la cultura de los pueblos originarios propios de México y del estado de Guerrero.

Las expresiones culturales en torno a una lengua originaria tienen un ingrediente muy especial, a todas ellas se las enaltece al exterior de las aulas, ya que se realizan foros, congresos y programas socioculturales en las que se observa que prevalece el lenguaje oral y que se manifiesta en distintos lenguajes del arte: la poesía, el baile y el canto son los más recurrentes y mediante ellos se hace visible la lengua originaria, sin embargo, esto no sucede al interior de las escuelas primarias bilingües. El trabajo que se realiza para el rescate y el empoderamiento de las lenguas maternas de los alumnos es muy escaso.

En la tercera parte de este libro se presentan las opiniones de una encuesta realizada a docentes de tres escuelas bilingües con enfoque intercultural, de igual manera se hace la crítica a la falta de un trabajo sistematizado para el empoderamiento de las lenguas maternas desde las aulas de la escuela primaria.
Del mismo modo se presenta el análisis de la encuesta aplicada a los estudiantes normalistas y se presenta una evaluación que permite de igual manera, realizar algunas conclusiones y recomendaciones.
Las conclusiones a las que se llega pueden ofrecer al lector y sobre todo al docente bilingüe, la necesidad de realizar planteamientos didácticos que ayuden a rescatar la lengua materna de los alumnos a través del lenguaje escrito, asimismo, se propone que se realice un trabajo sistemático planificado y orientado hacia el rescate y empoderamiento de la lengua materna de los alumnos, legando la responsabilidad al docente bilingüe, para que desde sus aulas se pongan las bases suficientes para abundar en la lengua materna y en la segunda lengua que en este caso es el español.