Reseña

Nunca se ha cuestionado el destino de Tana Fairchild. Su vida ha sido planeada desde el momento en el que nació: se casará con Landon, el hijo del gobernador, y asegurará una alianza sin precedentes entre las brujas de su isla natal y los habitantes del continente que consideran que su propia existencia es una amenaza.
Un día, durante una luna llena, el aquelarre de Tana decide liberar la mayor parte de su magia en el océano para tranquilizar a aquellas personas que han temido a su poder durante años. Pero cuando Tana se ausenta en el ritual de medianoche, lo cual se considera un grave error, no hay nadie que pueda ayudarla… hasta que conoce a Wolfe.
Wolfe afirma que él pertenece a un aquelarre que practica magia oscura, lo que lo convierte en una de las únicas personas que pueden echarle una mano. Y como se niega a permitir que el poder de Tana fluya hacia el mar, le enseña a usar esa magia prohibida. Una magia que la hace sentir poderosa. Viva.
A medida que el mar se vuelve más violento, el aquelarre de Tana pierde el control de las corrientes, un peligro que podría destruir tanto la alianza como la isla. Tana deberá elegir entre el amor y el deber, entre la lealtad a su pueblo y la lealtad a su corazón. Casarse con Landon aseguraría la paz para su aquelarre, pero perder a Wolfe y su magia salvaje podría costarle todo lo demás.