Reseña

El presente libro parte de la necesidad de repensar la relación arte y política en contextos de violencia e impunidad. Al margen de los regímenes de visibilidad y percepción dominantes, se busca reflexionar en torno a las condiciones de posibilidad de ciertos marcos alternativos para revelar el daño, el abuso o la pérdida que sacude a sociedades como la mexicana. El libro parte de una sospecha: la posibilidad de cultivar nuevas formas de sensibilidad política pasa por prestar atención a una serie de novelas, películas, fotografías y prácticas artísticas que desvelan el abuso de poder, las asimetrías sociales, la precariedad, el abandono.

No es casual que sea cada vez más frecuente apelar a una concepción de la política estrechamente entrelazada con lo estético y lo poético. La vocación por disrumpir y ampliar los regímenes de visibilidad y enunciación en torno a las violencias contemporáneas exige producir palabras e imágenes capaces de hacer ver y hacer sentir los desgarros sociales que suelen velar los discursos oficiales. En estas páginas se analiza la obra de una serie de escritores, fotógrafos y artistas que han explorado en los últimos años la potencia social y política que subyace tras la fuerza afectiva de ciertas historias de vida.