No fue penal
En esta obra de teatro, Juan Villoro relata con magistral habilidad la pasión por el futbol encarnada en dos personajes enfrentados por el deporte que más aman y que, a la vez, los separa al enfrentarlos a las contradicciones inherentes al mundo futbolístico, donde la entrega al juego más popular del mundo se entremezcla con las vicisitudes de la condición humana.