Los conductos del fuego
La historia que cuenta este poemario no es la típica en la que el amor surge, se vive y se desgasta culminando en la ruptura. En este libro partimos de que la ruptura en sí misma es un comienzo. De que los conductos por donde nos corre la sangre, desvencijados por las fracturas del corazón, pueden repararse, resanando las fugas, restableciendo las uniones, hasta que vuelvan a su resistencia habitual y el fuego pueda volver a fluir a través de ellos, contenido entre las cicatrices.