Reseña

Antes de cumplir los 30 años de edad, Luis Pasteur había hecho descubrimientos que serían fundamentales para la venidera estereoquímica, y no había alcanzado los 60 cuando los sabios lo aclamaban como uno de los máximos benefactores de la humanidad, al llegar a la cima de una carrera sin precedentes en el dominio de la ciencia experimental. Fueron tan múltiples y decisivas sus aportaciones a diversas ciencias, muy concretamente a la medicina, que tendemos a verlas como si hubiesen existido desde siempre, olvidando que son fruto de investigaciones efectuadas con un rigor y un discernimiento acaso nunca igualados, y que fueron objeto de polémicas que ahora asombran. No es raro, pues, que existan abundantes trabajos, en varias lenguas, en los que son ponderados y analizados la vida y los hallazgos del genial sabio francés. Con todo, la aparición de la presente obra es notoria por deberse a la pluma de un estudioso latinoamericano. Además de dominar la bibliografía acerca del tema y de estar familiarizado con la obra íntegra y voluminosa de Pasteur, el doctor Manuel Martínez Báez demuestra que, incluso en un campo aparentemente agotado, es posible reavivar la exposición con enfoques nuevos y revaloraciones sugestivas.