París a diario
Se dice que hay que escribir el libro que uno quisiera leer, nos dice Hugo José Suárez en la primera línea de este libro. A partir de esa premisa, se embarca en un viaje que lo lleva a transitar del viajero fascinado con ese lugar-objeto llamado París, al habitante ordinario de una urbe plena de motivos y situaciones que invitan a una reflexión más profunda: la del viaje interior de un observante privilegiado.
En París a diario Hugo José Suárez ofrece al lector impresiones a bocajarro e ideas reposadas, sentimientos entreverados con datos, citas y observaciones cotidianas, así como frases, recortes de periódicos y opiniones sobre las más diversas temáticas. La suma de estas partes constituye la voluntad de narrar una vida y dar sentido a lo aparentemente lejano. Más aún, filtradas por el ojo sociológico, estas impresiones dan lugar a una curiosa transustanciación: la de convertir lo extraordinario en ordinario y lo ordinario en algo digno de contar.