Reseña

Esta obra es una suerte de ritual primigenio que busca (más que plantear interrogantes acerca del ser y estar en este mundo) contestar esas preguntas que crecen a la par con nuestra conciencia. Un Dios difuminado ante el quehacer del hombre y sus dudas ingentes, por momentos, no es más que un testigo silente de un mundo donde el hombre y las fuerzas telúricas polarizan la atención del lector.
La voz del poeta se funde con un cuerpo de mujer y juntos protagonizan el caos original, la creación de un mundo aún sin el anatema divino, antes de la espada flamígera del Ángel que habría de expulsarlos del paraíso terrenal. Resulta así una poesía polifónica, subterránea como las fuerzas que mueven esa creación introspectiva que con no poca destreza lírica le da corporeidad al sentimiento amoroso muy por encima de la libido y de un hedonismo subyacente. ANTES DEL ÁNGEL es como caminar descalzo por la arena, siempre al ras del mar, buscando nuevos planteamientos, diferentes formas de descifrar un mundo saturado de enigmas evasivos y de verdades en fuga permanente amparados bajo una consciencia omnímoda.